Daría todo
porque tus ojos
me mirasen de nuevo,
por oír otra vez, tu dulce voz.
Quisiera que más manos
que de niño te acunaron
me escribieran un verso
lleno de sentimiento.
He aprendido a pensar
en más mundo que tu,
sin olvidarte, claro,
aunque mi sueño es
volver a verte y
no logro alcanzarte.
Que sus manos me escriban,
tus ojos me miren,
nuestros labios se rocen,
y me ames.
Por eso lo daría todos
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